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¿Cómo funcionan los detectores de mentiras?
Con los años, los estudios de laboratorio y de campo han demostrado que la mayoría de los mentirosos muestran patrones similares de cambios en el comportamiento físico, que no se pueden controlar. Los detectores de mentiras lo pueden medir y son reflejados mediante gráficos.
Con la correlación bioquímica de las emociones y con la reactividad corporal, el cuerpo humano puede reaccionar a cualquier estimulo (preguntas) que cambie sus distintos estados emocionales. Estas respuestas fisiológicas se miden y valoran mediante los componentes que constituyen los detectores de mentiras.
Las reacciones son orientadas, porque llevan un sentido, el estímulo es presentado de manera controlada. En otras palabras, las reacciones que miden, no son producidas por estímulos desorganizados, ni originados espontáneamente, sino por el contrario, las reacciones son productos de estímulos ordenados y emitidos de forma inteligente a través de preguntas.
